Edificios reanimados con arte

¿Qué hacemos con los inmuebles que ya no se usan? Todos estos artistas lo tienen bien claro. Tradicionalmente la tarea del arquitecto ha sido vista como algo cerrado sobre sí mismo, y el construir y habitar un edificio como un proceso sujeto a unas restricciones determiandas de antemano. En una sociedad cada vez más compleja, no tiene demasiado sentido considerar los espacios como algo a lo que sólo se le pueda dar un uso concreto, ni como algo sobre lo que sólo los especialistas -alias los técnicos, alias los arquitectos y sus aliados políticos- puedan actuar. El arte urbano o la recuperación artística de lugares en desuso sólo puede ser considerada como algo ilegal desde ese punto de vista, a nuestro juicio equivocado. Para los ciudadanos que no observamos la ciudad como un ente del que sacar partido económico sino como el lugar vivo en el que nos relacionamos, la perspectiva es otra. La perspectiva es que lo que hacen estos artistas con sus intervenciones en el espacio público o en inmuebles caidos en desuso es enriquecer una realidad a menudo gris, cuando no directamente negra. Precisamente por el papel social que juegan, ya sea por su capacidad de sorpresa, por su fuerza expresiva o porque hacen la ciudad un lugar más estimulante y agradable, aquí os hemos seleccionado algunas de nuestras propuestas favoritas, sin ningún orden particular. De nada. La fachada que da vueltas Llevando un paso más allá las modificaciones de Gordon Matta-Clark, el trabajo "Turning The Place Over", perpetrado por Richard Wilson, descompone la fachada de un edificio abandonado en Liverpool y literalmente le da no una, sino varias vueltas. Merece la pena ver el video. La fachada que se derrite Otro a quien le dio por jugar con las fachadas fue a Alex Chinneck, quien colocó una fachada falsa a un edificio en ruinas en la ciudad de Margate, haciendo que esta se resbalara hacia el suelo, revelando la pobredumbre que había detrás. Una forma de denuncia algo costosa, pero que desde luego llama la atención. El proyecto "Before I Die" ¿Cómo recuperarse de una tragedia personal y crear una obra que además sirva para unir a una comunidad? Candy Chang perdió a un amigo, pero ganó a un barrio cuando transformó una de las paredes exteriores de un edificio en una gran pizarra donde cualquiera podía escribir lo que quería hacer antes de morir. La casa de hielo Detroit se ha convertido en los últimos años en un emblema viviente de la decadencia del American Dream y en el paraíso de las casas abandonadas. Con este proyecto, el fotógrafo Greg Holm y el arquitecto Matthew Radune querían a la vez dar cuenta del problema y generar una especie de esperanzador monumento mágico a una ciudad que todavía vive. La casa fue demolida con el deshielo. Gasolinera de punto de cruz La artista Jennifer Marsh creó un verdadero ejército de expertos del "croché" formado por artistas, amateurs y hasta 2500 estudiantes para cubrir una gasolinera abandonada durante más de 50 años con alrededor de 3000 piezas tejidas a mano y transformar por completo el paisaje. Gasolinera de punto de cruz Esa pared me está mirando Cuando hablamos de devolverle la vida a los lugares, hay quien se lo toma por lo literal. Nikita Nomerz rescata diversos lugares olvidados y les pone rostro. Los resultados a veces dan miedo y otras veces risa, pero desde luego dan pie a que la imaginación se monte películas. Las apariencias engañan George Rousse es un maestro de la perspectiva, y también del color. Sus fotografías parecen hermosos paisajes industriales photshopeados hasta que... Oh wait. Aquí no hay más manipulación que unas capas de pintura. Las sombras pueblan el viejo hospital Las películas de fantasmas en viejos psiquiátricos son un subgénero en sí mismo, y probablemente la inspiración para esta intervención del artista brasileño Herbert Baglione en un hospital en Parma. Si eres fan de Cuarto Milenio te va a gustar. Si no, probablemente también. La catedral que explotó en colores Las iglesias no han sido tradicionalmente conocidas por su colorido ni la alegría de sus usuarios. Ésta, situada en un barrio periférico de Washington D.C. y reanimada por el artista urbano HENSE, sería la excepción, aunque ojalá fuera la regla. El árbol es la vida Otra instalación en espacios religiosos, cargada de un fuerte simbolismo, fue este "Hanging Garden" que Shinji Turner-Yamamoto llevó a cabo en el interior de una iglesia en Cincinnati. El árbol fue replantado delante de la iglesia al cabo de un tiempo. ***Vía Playgroundmag