La hermosa playa de Sayulita se ubica al sur del estado de Nayarit y su apacible playa y su blanca arena son el mejor escenario para esas vacaciones que ya estás planeando, ya sea con tu amorcito, los amigos o tu familia.
La hermosa playa de Sayulita se ubica al sur del estado de Nayarit y su apacible playa y su blanca arena son el mejor escenario para esas vacaciones que ya estás planeando, ya sea con tu amorcito, los amigos o tu familia.
De paseo por Sayulita, en el paradisiaco estado de Nayarit, nos encontramos con un hotel perfecto para ese romántico viaje en el que te quieres desconectar de todo y sumergirte en el mar y el relax total.
Porque nos encanta ir a la playa (te recomendamos una opción según tu plan de viaje) y experimentar cosas nuevas encontramos Haramara significa “nuestra madre el mar” en huichol. Para los wixaritari (huicholes) el mar es el origen de la vida, el lugar de donde vienen todas las cosas.
Haramara es también el nombre que Tita de la Borbolla, con permiso de un chamán huichol, eligió para su hotel en las playas del Pacífico mexicano. Haramara Retreat está en Sayulita, Nayarit, a 45 minutos de Puerto Vallarta.
Es un terreno de cinco hectáreas que se localiza entre la Sierra Madre y el Océano Pacífico, donde los huicholes bajan al mar durante sus peregrinajes para dar gracias.
“Para mí, Haramara no es sólo un hotel hecho con la intención de tener un negocio, mi propósito es compartir la forma de vida que yo aprendí y que me sanó, y afortunadamente este lugar ha tenido un éxito tremendo”, cuenta sobre su experiencia con el budismo.
Para crear este paraíso, que armoniza con las áreas boscosas, se utilizaron materiales no agresivos con medio ambiente. La construcción reunió un equipo con los mejores palaperos y albañiles locales para crear un diseño en forma de herradura, que hace que la subida de 90 metros desde la playa hasta el punto más alto no se sienta pesada.
El resultado son 17 casitas y un dormitorio, donde cada detalle es cuidado minuciosamente en una mezcla de austeridad y lujo. Las pequeñas casas están suficientemente descubiertas para facilitar un contacto directo con la naturaleza y, al mismo tiempo, fueron planeadas a la perfección para brindar suficiente privacidad a cada uno de los huéspedes.
El hotel, además, tiene dos salones de meditación en los puntos más altos con vista de 360 grados a las montañas y una alberca en la parte más alta.
Hace poco, la revista Yoga Journal consideró a Haramara como uno de los 10 mejores yoga retreats del orbe.
Aunque la práctica del yoga predomina, también se llevan a cabo talleres de meditación, tai chi, pilates y están abiertos a cualquier actividad de crecimiento personal que se les proponga.
Como parte de su misión de bienestar integral, tiene un centro terapéutico con profesionales de varias regiones del mundo que realizan procesos de limpieza y curativos.
El lugar es ideal para quien desea descansar y desconectarse: no tiene Wi-Fi y la señal de teléfonos celulares es muy débil, algo que en un principio puede resultar difícil, pero con el paso de los días no solo se deja de extrañar, sino que se disfruta enormemente.
Haramara nos plantea cómo vivir, cómo descansar y cómo hacer negocios con integridad y cuidando el medio ambiente: “Queremos que la gente viva con más integridad, y mientras esa integridad podamos transmitirla, nuestros huéspedes comprobarán que sí se puede”, sintetiza Sajeela.
***Vía Dondeir
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